Se podría definir, por ejemplo, como el practicado en el mismo día en el que se solicita (dentro de las primeras 24 horas, aproximadamente, desde que se solicita).
Tiene utilidad clínica en el caso del estatus epiléptico, tanto en el convulsivo como en el no convulsivo. En el caso del convulsivo, tras tratarlo, como ha señalado Praline, y previamente Thomas (Thomas P. Etats de mal convulsifs: indication de l´EEG d´urgence. Neurophysiol Clin 1997; 27: 398-405).
La utilidad del electroencefalograma en el estatus ha sido afirmada recientemente por Praline (Praline J et al. Emergent EEG in clinical practice. Clin Neurophys 2007; 118: 2149-2155) y ya se había venido confirmando como cierta por experiencia propia en diversas ocasiones a lo largo de los años.
Tal como ha planteado el profesor Peleteiro, de la Facultad de Medicina de Santiago de Compostela, en una reunión celebrada en el año 2012, quizá convendría distinguir entre la urgencia inmediata (por ejemplo, en el caso del estatus refractario) y la urgencia diferida (por ejemplo, en el caso del estatus no convulsivo).
Parece ser que el electroencefalograma urgente normal podría ser un factor de buen pronóstico.
Parece ser que en niños con una primera crisis epiléptica el electroencefalograma practicado dentro de las primeras 24 horas es anormal en un 51% de los casos, y en un 34% de los casos si se practica pasadas las primeras 24 horas desde la primera crisis.
El estatus no convulsivo puede pasar desapercibido como tal clínicamente (durante semanas incluso), al poder imitar a una diversidad de cuadros psiquiátricos o neurológicos (síndrome confusional, demencia, ictus, etc.), por lo que, dada la experiencia propia con el electroencefalograma urgente en el estatus no convulsivo, se considera una técnica neurofisiológica de importancia creciente. Por ejemplo, a lo largo del año 2011 personalmente se le practicó un electroencefalograma a 10 pacientes en estatus eléctrico no convulsivo, de los cuales 5 fueron enviados a hacer el electroencefalograma con el diagnóstico de sospecha de estatus epiléptico no convulsivo, pero los otro 5 no (acudieron con diagnósticos de trastrorno del comportamiento, síndrome depresivo, deterioro cognitivo y disminución del nivel de conciencia de origen incierto), siendo en estos casos por tanto decisivo el papel del electroencefalograma.
Ziai et al (Ziai WC et al. Emergent EEG in the emergency department in patients with alterered mental states. Clinical Neurophysiology 2012; 123: 910-917) están investigando la figura clínica del electroencefalograma urgente, sobre el que afirman que no hay criterios establecidos de momento. Según estos autores, un 10% de los pacientes vistos en los Servicios de Urgencias presentan crisis cerebrales o un estado mental alterado (altered mental status, AMS). Está en discusión si debe haber un equipo de electroencefalografía en los Servicios de Urgencias y cuál debería ser el estatus del neurofisiólogo, por ejemplo, si debería estar pendiente de las llamadas de Urgencias mediante guardias localizadas o mediante otra fórmula, etc., y también la posibilidad de utilizar Internet y otros medios de telemetría similares para que el neurofisiólogo pueda ver el electroencefalograma hecho en Urgencias por un técnico desde la distancia. También está en discusión el plazo de tiempo necesario para responder a la llamada; en su artículo, Ziai et al han investigado los resultados obtenidos con un tiempo de respuesta menor de 30 minutos, obteniendo como resultado que en la mitad de los pacientes con AMS, el electroencefalgorama ayudó a establecer el diagnóstico pero que en pocos casos influyó en el tratamiento aplicado, y también encontraron que un registro de 5 minutos, frente a los 20 minutos como mínimo acostumbrados, presenta una fiabilidad adecuada que podría facilitar la incorporación del electroencefalograma a las salas de Urgencias.
Camiña J et al (Camiña J et al. ¿Es el EEG urgente una prueba complementaria imprescindible en hospitales universitarios o, al menos, de tercer nivel? Análisis retrospectivo de los EEG urgentes realizados en 2013. Rev Neurol 2014; 59: 330-331) han encontrado que el electroencefalograma en Urgencias es útil desde el punto de vista diagnóstico y terapéutico en pacientes con alteración del nivel de conciencia cuando aparecen anomalías epileptiformes en pacientes sin antecedente conocido de epilepsia si existía la sospecha clínica previa de crisis epiléptica o focalidad transitoria, pero han encontrado menor utilidad diagnóstica y terapéutica del electroencefalograma urgente en pacientes que ya eran epilépticos conocidos.
Diversos autores han consignado las indicaciones del electroencefalograma urgente: estados confusionales, sospecha de estado de mal no convulsivo, coma de origen desconocido y crisis postraumáticas agudas (1. Pagoda A et al. The emergency department evaluation of the adult patient who presents with a first-time seizure. Emerg Med Clin North Am 2011; 29: 41-49. 2. Krumholz A et al. Practice parameter: evaluating an apparent unprovoked first seizure in adults (an evidence-based review). Report of the Quality Standards Subcommittee of the American Academy of Neurology and the American Epilepsy Society. Neurology 2007; 69: 1996-2007. 3. Gironés C et al. Primera crisis epiléptica en urgencias hospitalarias. Rev Neurol 2015; 60: 96).
No hay comentarios:
Publicar un comentario